jueves, 7 de febrero de 2013

DICHOSAS VACUNAS

Tu bebé cumple dos meses y llega el dichoso día de la primera vacuna del calendario de vacunación. Ya antes del parto había pensado en este tema. En el el hospital me la colaron con la de la Hepatitis B, me pillaron en un renuncio y cuando me quise dar cuenta ya la tenia puesta. . Hablo con la pediatra el día D, me comenta que "respeta mucho el movimiento antivacunas, pero que en la mayoría de los casos no tiene rigor científico...". Me dice que "en 25 años que lleva ejerciendo la profesión jamás ha tenido ningún problema con ningún niño.." etc, etc...Vamos que lo lógico según ella sería que se las pusiera. Le pregunto a la matrona, ella me da la razón, me dice que no es necesario, que tengo razón con lo de los coadyuvantes, que son una mierda, pero que van en muy pequeña proporción en las vacunas, que el mundo es una mierda y esto y lo otro. Ella al menos me dice que me puedo quedar con la tranquilidad que "gracias a todos los padres que si han decidido vacunar a sus hijos es muy probable que la mía no se pille nada", " que si no hay un solo caso de polio en España en más de 15 años es porque existe la vacuna...". En fin que me siento igual que al principio, con las mismas dudas. Pero cuando llega el día de vacunarla  le paro los pies a la enfermera: "Mire no estoy segura", ella ante mi duda me comenta que si no estoy segura que no se la pone, que "tiempo habrá". Dos días después tengo a la niña ingresada con bronquiolitis, a pesar que el maravilloso día de la vacuna es auscultada por la pediatra, y doy gracias a los cielos por no haberla vacunado, si llego a vacunarla se le juntan el hambre con las ganas de comer y a saber qué hubiera pasado. Después de una semana en el hospital, acudo a la pediatra y le comento la jugada, a lo que me contesta que "menos mal que no la vacunamos"...

Todo esto lo cuento porque me parece que muchas de nosotras pasamos por lo mismo, las mismas dudas, el mismo miedo en el cuerpo de ser una especie de malas madres por no vacunar a los peques. Está claro que muchas vacunas salvan vidas, pero otras parecen estar como de relleno. La información acerca de na NO VACUNACIÓN, no es del todo clara y a veces viene de organismos extranjeros en los que no sabemos si podemos confiar. Lo cierto es que muchos niños en España no están vacunados y andan divinamente. Al parecer depende del sistema inmunológico del niño, si es fuerte podrá enfrentarse a algunas cosas pero hay otras contra las que no se puede convatir.

 La otra historia es el entorno, todo el mundo te dice que le vacunes y sin más, que no pasa nada, "mira tú estas vacunada y tan bien"...Claro, pero el sentimiento de culpa nos persigue hasta límites insospechados, aunque la lógica apunte a que sea practicamente imposible que tu hija pille una hepatitis B (ya que el contagio sería por transmision sexual o sangre) o una polio. Lo que más me inquieta y mosquea es  por qué seguimos haciendo a pie juntillas lo que se nos dice, por qué no podemos contrastar la información de manera segura.

Finalmente he decidido vacunar a mi peque después de consultar con un amigo pediatra, a amigas que vacunaron y que no vacunaron, a un médico naturista de confianza...Será un rato de llanto y de pasarlo mal, pero por lo menos sé que lo que he hecho ha sido meditado y con todo el amor de mi corazón...

Sorry nenita, es por tu bien. :-)


1 comentario:

Anónimo dijo...

creo que en esta sociedad el miedo es el motor que nos impulsa a hacer muchas cosas que no deseamos. yo despues de informarme mucho y de leer a diversos pediatras por la no vacunacion, me trage mis miedos y mis lagrimas y decidi hacer caso a mi corazon y a unos "cuantos locos", decidi no vacunar y enfrentarme al mundo, sin reproches a mi persona, pues creo que esta siendo una decision acertada y si mi hijo no lo ve asi el dia de mañana.....siempre hay tiempo para un pinchazo. El tiempo me esta diciendo, que es un niño muy sano que apenas coge un resfriado; yo creo que es consecuencia de un sistema inmunologico muy fuerte por la ausencia de vacunas.OS ANIMO A QUE HAGAIS CASO A VUESTRO CORAZON